La
comunicación siempre tiene dos extremos, uno es el emisor y el otro es el receptor.
Ellos comparten un punto central el cual es el mensaje. Para que este mensaje
sea entendible y pueda haber una comunicación efectiva es necesario que ambos
compartan el mismo código, que es el idioma, el mismo que es la materialización
en palabras de nuestros pensamientos y emociones. Pero como siempre en
cualquier caso hay un punto en contra, se encuentra de igual forma aquí: EL
RUIDO.
RUIDO
es todo aquello que no permite que llegue o se de la comunicación
correctamente. En el mundo de la radio también se detectan ruidos. Tales como
la mala pronunciación de las palabras, el timbre de voz, la mala postura en
cabina, la que perjudica la respiración y por esto la voz es entrecortada y sin
volumen.
Otra
forma de ruidos es por ejemplo la mala calidad del micrófono, en el caso del
trasmisor, si este no tiene la debida potencia, pues la señal no llegará a la
antena y se dará origen a un ruido. Otra forma es la cantidad de emisoras
vecinas en el dial, cuando éstas son demasiadas, ya no hay lugar para más se ocasiona RUIDOS. Cuando escuchamos
radio realizando otras actividades que generan distracción, igual se detecta el
RUIDO. En lo respecta al aspecto cultural es recomendable hablar con las
personas del mismo idioma, de lo
contrario, también ahí se hablará de ruidos que interrumpen la comunicación.
Se
debe tomar en cuenta que la PRINCIPAL CONDICIÓN DE UN BUEN COMUNICADOR ES EL
SABER ESCUCHAR.
En
radio se encuentran TRES VOCES: La voz humana, la cual se expresa a través de
palabras; la voz de la naturaleza, que es la de los ambientes, los efectos de
sonido; y la voz del corazón, donde encontramos a los sentimientos, esta voz se
expresa a través de la música. Las tres voces son sumamente importantes. Pero
definitivamente la voz humana es la más transparente, ya que informa, dialoga,
explica y acompaña.
Así
como la radio tiene TRIPLE VOZ, también cuenta con tres códigos
complementarios, que son especialidades de cada voz, y son: imaginación,
emoción y razón.
LA
PRIMERA SENSUALIDAD DE LA RADIO, se puede decir que es la música-como lenguaje
radiofónico- y es que por ahí se comienza. La música hace que nos sintamos
dentro de un círculo emotivo, aquí se detallan las distintas emociones:
alegría, tristeza, amor, etc. Si sentimos a la música, nos transportará y es ahí
donde una ves más se comprueba la magia de la RADIO.
Cuando
se está en radio, se tiene que HABLAR CLARO, algunas personas hablan con
gracia, y otras carecen de ellas, por esto es necesario cultivar nuestra manera
de expresarnos verbalmente. Se tiene en cuenta la agricultura de la palabra. E
s bueno saber a qué terreno vamos a entrar para hacer una limpieza, quitar lo
malo y empezar de cero.
Para
lograr una idónea comunicación es importante demostrar la CULTURA que
establecemos con las personas quienes nos rodean.
El
lenguaje radiofónico tiene que ser sencillo, que se las palabras se entiendan
sin diccionario, que se comprendan a la primera vez de ser escuchadas. Este lenguaje se divide en dos:
LENGUAJE ACTIVO Y LENGUAJE PASIVO. El primero lo conforma las palabras que la
población utiliza diariamente; y el segundo lo compone las palabras que ello
las entienden, pero no usan con frecuencia.
L a
clasificación de las palabras depende de los distintos contextos de cada país,
de los niveles de instrucción y de la forma cómo expresarse. En lo que respecta
a LAS MALAS PALABRAS, tendríamos que saber el origen de las mismas y descartar
su uso sin criterio. Las vulgaridades se han extendido por todas partes, de
todos modos las reglas del buen hablar están en nuestra cabeza y conforma
nuestro sistema nervioso, y es lo que al final demostraremos cuando nos
expresamos. Por esto es fundamental APRENDER A HABLAR BONITO, teniendo gracia y
chispa en nuestras palabras. Las buenas palabras para radio, son aquellas que
se pueden oler, ver, tocar y saborear, son aquellas que pueden crecer, están
vivas, se proyectan y se mueven en nuestra pantalla interior, son LAS PALABRAS
CONCRETAS.
La radiodifusión
permite la variedad y es que en la variedad está el gusto y en la diferencia el
derecho, es por esto que la radiodifusión no va en contra de su cometido, ni
malogra el idioma, por lo que incorpora la EXPRESIONES Y CONSTRUCCIONES
REGIONALES.
El
lenguaje radiofónico, tiene que ser un LENGUAJE NO SEXISTA, cumpliendo con:
Explicitar el doble sujeto de una acción, buscar sujetos más amplios que
abarquen a ambos géneros, feminizar las palabras que han sido secuestradas por
los hombres, equilibrar los ejemplos con que hablamos, evitar los saltos
semánticos, emplear la regla de la inversión, evitar comparaciones fastidiosas.
Tener
en cuenta todo esto nos ayudará a mejorar nuestro lenguaje, es importante lo
que se dice, como el tono en que se dice, porque así se ESCUCHARÁ.
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